"Quisiera saber llorar como un niño para sentirme mejor hombre"
"Vivo para creer; creo para vivir"

jueves, 11 de agosto de 2022

Una larga historia

 

Quien bien me conoce, sabe que la música y yo formamos buena pareja casi desde que nací. Mi oído se educó entre clásicos de rock, heavy, contry, blues, baladas y músicas iluminadas por grandes bolas de cristales en lo que antes eran discotecas y ahora no sé muy bien cómo denominar.

He mantenido siempre la certeza de que si algún día pierdo el interés por la música, habrá llegado el momento de decir claramente que mi mente es demente y podrán sacrificarme como a un caballo del lejano oeste que se rompió una pata corriendo por algún polvoriento camino de Oklahoma.

Queen, Rolling Stones, Springsteen, Dire Straits, Fito y muchos otros etcéteras, forman parte del repertorio que habitualmente reproduzco en el propio ordenador del trabajo. No molesto a nadie; es más, algún compañero e incluso jefes me han pedido alguna que otra de esas selecciones que siempre me gusta tener como fondo de cualquier jornada laboral que me lo permita.

Pero ayer resultó curioso que dos compañeros en diferentes momentos se me acercaran y me preguntaran: ¿De dónde has sacado la música que tienes puesta Luismi?

Con media sonrisa, sólo pude contestarles… “Una larga historia para contar mientras tomamos unas buenas birras”. Dicho y hecho.